El grado de las lesiones meniscales marcará el tipo de deporte que se puede practicar. Leer más
Apuesta por una vida activa, las consecuencias del sedentarismo
Una de las consecuencias del sedentarismo son los problemas cardiovasculares y el mayor riesgo de padecer cáncer
La depresión o la apatía pueden ser consecuencias del sedentarismo
Sabemos que un estilo de vida saludable conlleva abandonar el sedentarismo. Pero ¿sabemos realmente que es llevar una vida sedentaria? ¿Conocemos las consecuencias del sedentarismo? A tenor de los datos de la Organización Mundial de la Salud, no. Al menos un 60% de la población no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud. Además, España es uno de los cuatro países más sedentarios de Europa.
Las consecuencias del sedentarismo son más graves de lo que podemos llegar a creer. Casi todo el mundo sabe que la falta de ejercicio fomenta el sobrepeso y la obesidad. Eso significa un mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo II e hipertensión arterial. Además, una persona sedentaria tienen entre un 20 y un 30% más de posibilidades de morir de forma prematura. Y en el caso de las mujeres, los efectos de la menopausia pueden afectar más.
Por si no fuera poco, una de las consecuencias del sedentarismo es que aumenta el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer. Como en el endiometro, en el intestino o en los pulmones, según una investigación de la Universidad de Ratisbona (Alemania).
A las consecuencias físicas se unen las psicológicas. Practicar ejercicio físico de manera regular ayuda a evitar caer en depresión o en ansiedad. Además de ser un gran liberador del estrés. También se consigue reducir la apatía y el embotamiento afectivo. Y llevar una vida activa ayuda a prevenir determinadas enfermedades neurodegenerativas.
Así que la opción de elegir entre una vida activa y una vida sedentaria está clara. Hay que dejar de ser una persona sedentaria y ponerse las pilas. Y no hace falta que te lances a hacer deporte sin parar. Con cambiar algunas rutinas diarias es suficiente. Llevando a cabo pequeños gestos será más fácil cumplir con la recomendación de la OMS de dedicar un mínimo de 150 minutos semanales para practicar una actividad física moderada.
Por ejemplo, tomemos como base las recomendaciones de la Fundación Española del Corazón para dejar de lado la vida sedentaria:
- Dedica 30 minutos al día a dar un paseo tranquilo. Además hay trayectos que podemos hacerlos andando en lugar de coger el coche. O si vas en transporte público, bájate un par de paradas antes.
- Las escaleras son tus amigas. Deja el ascensor para quien de verdad lo necesita y sube por las escaleras.
- Aprovecha el carril bici. Ahora que hace buen tiempo, ¿por qué no ir en bici al trabajo? Además así contaminas menos.
- Visitas guiadas. Seguro que en tu ciudad o en los alrededores se hacen visitas guiadas, rutas de senderismo, excursiones… Apúntate y disfruta.
- Si estás en casa, olvida el sofá. Baila, ponte videos de ejercicios sencillos, mira la tele desde una bici estática… busca una excusa para no quedarte sentado en el sofá.
- En la oficina también busca una excusa para moverte. Levántate de la silla y anda para llevar documentos, hablar por teléfono o conversar con un compañero… así evitarás estar todo el tiempo sentado.
Estos son algunos consejos para que elegir entre una vida activa y una vida sedentaria sea fácil. Eso sí, hazlo de manera gradual, con objetivos realistas para no perder la motivación y marcándote retos semanales. Así evitaremos las consecuencias del sedentarismo. Y nos sentiremos mucho mejor, tanto física como mentalmente.
Cómo correr sin sufrir lesiones, los beneficios de las plantillas ortopédicas
El running es el deporte de moda. Pero como todas las actividades físicas se corre el riesgo de sufrir lesiones si no se toman las medidas adecuadas. En este caso es fundamental usar unas buenas zapatillas, calentar bien antes de empezar a correr, intentar no forzar más de lo que se puede y usar productos de ortopedia, como unas plantillas ortopédicas, para proteger las articulaciones. Esos son solo algunos de las cosas que hay que tener en cuenta para correr bien y evitar las temidas lesiones.
Los beneficios del deporte y el papel de la ortopedia
Hacer ejercicio, practicar algún deporte tiene muchos beneficios para nuestra salud física y nos ayuda a prevenir enfermedades. También tiene muchas ventajas para nuestra salud mental y la autoestima. Hacer deporte mejora el estado de ánimo, disminuye el estrés y nos genera sensación de bienestar. Además si utilizas la ortopedia como apoyo para prevenir lesiones, los beneficios son mayores.
Deporte para combatir el síndrome postvacacional
Cerca de un 30% de los trabajadores sufre o va a sufrir un síndrome postvacacional en las próximas semanas en España. Si no quieres ser uno de ellos y prefieres enfrentar la vuelta al trabajo de manera positiva hay una serie de consejos que vale la pena seguir, sobre todo practicar algún deporte y seguir una dieta saludable.
Consejos de salud: ¿qué deben comer los deportistas para estar sanos?
Una cuestión que suscita una gran cantidad de preocupaciones en la mayoría de personas es la alimentación. Alimentarse adecuadamente es importante, en todos los casos, pero hay situaciones en las cuales la nutrición cobra especial relevancia. Sobre todo, en relación a los deportistas.
El deporte en niños con problemas de salud
Hacer ejercicio es una de las claves de la vida saludable y de una alta calidad de vida. Pero existen condicionantes que a veces imposibilitan llevar a cabo determinadas actividades físicas. Es el ejemplo de los niños con alguna patología, problemas de traumatología u ortopedia. En estos casos también está recomendado el ejercicio por los beneficios que aporta, pero debe adaptarse al cuadro clínico.
Leer más
Consejos ortopedia: la elección de zapatillas de running
El running se está convirtiendo en el deporte de moda. Sin embargo, el desconocimiento por parte de numerosos de sus participantes está propiciando consultas en las clínicas de ortopedia y traumatología acerca de lesiones y sobrecargas (por ejemplo, el dolor de espalda derivado de las posturas inadecuadas).