Lesiones más comunes por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas en la zona lumbar

Las lesiones por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas en la zona lumbar pueden afectar a personas de todas las edades y estilos de vida, desde atletas hasta trabajadores de oficina.  

Son problemas comunes que pueden surgir de varias actividades y malos hábitos posturales, llegando a ser extremadamente dolorosas y limitantes, afectando la calidad de vida de las personas que las sufren. 

En este artículo, explicaremos las causas, los síntomas a tener en cuenta y las estrategias de prevención y tratamiento para las lesiones más comunes por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas en la zona lumbar.   

¿Qué es una lesión por sobrecarga? 

Las lesiones por sobrecarga o lesiones por uso repetitivo, son lesiones que ocurren cuando una parte del cuerpo es sometida a un sobreesfuerzo.  

Cuando este sobreesfuerzo es a nivel muscular, ocurre una sobrecarga muscular, en donde se produce una contracción involuntaria del músculo y las fibras musculares.  

Al mantener este sobreesfuerzo muscular en el tiempo, se produce incomodidad, inflamación y dolores en la zona afectada.  

Es relativamente fácil percibir una sobrecarga de manera externa, puesto que puede apreciarse un aumento del tono al tocar la zona y el músculo suele estar más tenso de lo normal. 

Causas de las lesiones de sobrecarga muscular por sobreesfuerzo 

Puede darse en cualquier persona, ya sea por exceso de ejercicio, levantamiento de cargas inadecuadas, transporte de carga excesiva, una mala ejecución de los movimientos y posturas inadecuadas. 

Hay zonas del cuerpo que tienen más riesgo de sufrir lesiones por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas, como el cuello, los hombros, las piernas, los brazos y la zona lumbar. 

Lesiones más comunes por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas en la zona lumbar 

Las lesiones más características de la zona lumbar por un sobreesfuerzo muscular son: 

Lumbalgia 

La lumbalgia es un término utilizado para describir el dolor de espalda baja que ocurre en la región lumbar. Es una condición común que afecta a una parte significativa de la población. El dolor experimentado con la lumbalgia puede variar en intensidad y puede ir acompañado de rigidez o limitación en el movimiento en la parte baja de la espalda. 

Ciática 

Es una lesión similar a la lumbalgia, pero de mayor alcance, por una presión sobre el nervio ciático. En este caso existe dolor, debilidad, entumecimiento u hormigueo en una pierna, por lo general, acompañado de dolor lumbar. 

Hernia discal 

Es una condición en la que un disco intervertebral, que actúa como amortiguador entre las vértebras de la columna vertebral, se desplaza o se rompe, lo que puede causar síntomas como dolor, debilidad y hormigueo.  

La hernia de disco puede ocurrir en cualquier parte de la columna vertebral, pero es más común en la parte baja de la espalda y en el cuello. Los pesos que se levantan adoptando posturas incorrectas aceleran el deterioro del disco. 

Esguince lumbar 

Cualquier fuerza de intensidad suficiente puede producir un desgarro en los músculos y tendones de la zona lumbar. Esto se produce con frecuencia en los deportes que requieren empujar o traccionar contra resistencia elevada (p. ej., levantamiento de pesas, fútbol americano) o un giro brusco de la espalda (p. ej., baloncesto, béisbol, golf). 

Deformaciones congénitas en la columna 

También tenemos que tener en cuenta la genética como factor agravante para las lesiones de espalda, estas condiciones pueden determinar un sobreesfuerzo muscular para las personas, generando sobrecargas en la espalda. 

Escoliosis 

La escoliosis es un problema médico que causa una curvatura hacia los lados de la columna vertebral. La curvatura puede tener forma de “S” o “C”. En la mayoría de los casos, no se sabe qué causa esta curvatura. 

Hiperlordosis 

Ocurre cuando la columna vertebral presenta una curvatura excesiva hacia adentro en la región lumbar, lo que provoca que la parte inferior de la espalda se vea más arqueada que lo normal. La hiperlordosis puede resultar en una apariencia de «espalda hueca» y afectar la alineación de la columna vertebral. 

La lordosis lumbar exagerada aumenta la tensión sobre los músculos y ligamentos que estabilizan la columna.  

Cifosis 

Es una condición en la cual la columna vertebral presenta una curvatura excesiva hacia adelante en la región dorsal, lo que provoca que la parte superior de la espalda se vea más redonda de lo normal. Esta condición también es conocida como «joroba» o «chepa». 

Factores de riesgo para presentar sobrecarga lumbar 

Entre los factores de riesgo que pueden desencadenar lesiones por sobrecarga lumbar se encuentran: 

  • Levantamiento frecuente de pesos de 5 Kg o más, especialmente si son levantados con los brazos y piernas estirados y la espalda flexionada o rotada. 
  • Exposición a vibración general del cuerpo, particularmente en conductores de tractores y camiones. La frecuencia vibratoria más perjudicial se sitúa entre 4 y 6 Hz. 
  • Estiramientos frecuentes de la columna vertebral. 
  • Frecuentes cargas verticales sobre la cabeza u hombros. 
  • Realización de trabajos sedentarios. 
  • Trabajos que exigen el mantenimiento de posiciones prolongadas. 
  • Realización de trabajo con fuerte demanda física. 
  • Trabajos que incluyen frecuentes rotaciones del tronco. 
  • Gran talla corporal. 
  • Baja flexibilidad de la columna. 
  • Baja forma física con pobre tono de musculatura abdominal y lumbar. 
  • Factores psíquicos. 
  • Embarazo. 
  • Deportes que se practican con flexión lumbar. 

Prevención de lesiones por sobrecarga muscular 

Para prevenir la aparición de lesiones por sobreesfuerzo muscular y sobrecargas en la zona lumbar, sigue estos consejos: 

  • No pases muchas horas sentado: Se recomienda levantarse cada 45 minutos. 
  • Utiliza sillas ergonómicas regulables y que respeten la curvatura de la columna. 
  • Inclina ligeramente el respaldo para evitar la carga axial en la columna y en la musculatura. 
  • Si estás de pie, utiliza un calzado de 1,5 hasta 3 cm de altura. 
  • Evita estar mucho tiempo parado. Al caminar, las cargas axiales se van distribuyendo por el cuerpo y la columna no sufre tanto. 
  • Si es un trabajo donde coges objetos de peso desde el suelo, realiza la carga ‘’vertical’’ doblando las rodillas y manteniendo la espalda recta. 
  • Para transportar pesos, debes hacerlo siempre acercando el objeto hacia el pecho. 
  • Evita la flexión de la columna a la hora de cargar peso, flexionando en su lugar las rodillas. 
  • Procura empujar o arrastrar los objetos en lugar de levantarlos. 
  • Usa la faja de contención lumbar T-420 para prevenir las lesiones de espalda, gracias a su fuerte sujeción, contención y ajuste.  
  • Emplea medios mecánicos, en la medida de lo posible, para el transporte y levantamiento de cargas. 
  • Mantén una posición erguida, tanto de pie como sentado, procurando no flexionar la columna hacia adelante, esto evitará cargar en exceso las vértebras lumbares. 
  • Si debes conducir durante periodos prolongados de tiempo, haz descansos periódicamente. 
  • Evita calzado con tacón mayor a 4 o 5 cm. 
  • Lleva un estilo de vida activo, esto ayuda a fortalecer los músculos. Realizar deportes como pilates, yoga o natación ayuda a reforzar la zona lumbar y cervical.  
  • Existen las escuelas de espalda en clínicas y centros deportivos, que son departamentos especializados en patología osteomuscular de la espalda.  

Tratamiento para lesiones lumbares 

El tratamiento al inicio debe consistir en reposo, hielo y compresión. Una vez que comienza la curación, la mayoría se beneficia de los ejercicios de fortalecimiento de los músculos abdominales y de estiramiento y fortalecimiento de los músculos paravertebrales para recuperar la flexibilidad. 

Una opción ideal para retomar las actividades y evitar los síntomas lumbares es la faja de alta contención lumbar T-421. Perfecta para personas que presentan sobrecargas intermitentes de la zona lumbar, movimientos repetitivos y esfuerzos constantes de la espalda. 

Los analgésicos y los relajantes musculares pueden ayudar en situaciones agudas a mejorar el dolor. En algunos casos, se pueden administrar inyecciones de corticosteroides cerca del nervio afectado para reducir la inflamación y aliviar el dolor. 

En casos graves o cuando otros tratamientos no han proporcionado alivio, se puede considerar la cirugía.