Considerando que el 13% de la población adulta mundial es obesa y 39% tiene sobrepeso, según datos de la OMS, y que estas cifras siguen aumentando con el paso de los días, nos encontramos ante una de las problemáticas más importantes a nivel mundial.
No sólo por tratarse de una enfermedad crónica, sino por las distintas consecuencias que puede traer consigo. En vista de esto es importante tener en cuenta algunos puntos claves que puedan ayudar a disminuir los problemas de obesidad y cuidarnos de la aparición de sus consecuencias.
Índice
¿Qué es la obesidad y cuáles son sus grados?
La obesidad es una enfermedad crónica multifactorial, en donde se altera la composición corporal por un exceso de tejido graso. A pesar de que existe un componente genético, el consumo excesivo de energía, combinado con un estilo de vida sedentario, representan la principal causa de la obesidad actualmente.
Los grados de obesidad vienen dados por el índice de masa corporal, que es la relación entre el peso y la talla (Kg/m2) de una persona, y se distribuye de la siguiente manera:
- Normal: IMC 18.5- 24.9 Kg/m2
- Sobrepeso: IMC 25- 29.9 Kg/m2
- Obesidad: IMC 30 – 34.9 Kg/m2
- Obesidad severa: IMC 35- 39.9 Kg/m2
- Obesidad mórbida: IMC ≥ 40 Kg/m2
Consecuencias de la obesidad para la salud
El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de desarrollar algunas enfermedades y pueden vincularse con algunos problemas emocionales y sociales entre las que podemos nombrar:
Diabetes tipo 2
Ocurre por un aumento de la glucosa en la sangre; se estima que 8 de cada 10 personas con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso o problemas de obesidad. El azúcar alto en la sangre durante largo tiempo ocasiona enfermedades del corazón, derrames cerebrales, enfermedades renales, problemas oculares, daño de los nervios, entre otros problemas de salud.
Presión arterial alta
La hipertensión arterial ocurre por un aumento en la fuerza con la que la sangre fluye a través de los vasos, lo cual puede ocasionar daños en el corazón y los vasos sanguíneos.
Enfermedad cardíaca
La obesidad suele estar relacionada estrechamente con daños al corazón, aumentando el riesgo de sufrir infarto al miocardio, insuficiencia cardíaca y angina de pecho.
Derrame cerebral
Los accidentes cerebrovasculares ocurren por una interrupción repentina en el suministro de sangre al cerebro. Puede deberse a una obstrucción o rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro. Las personas obesas tienen un riesgo aumentado por la acumulación de grasa en los vasos y la hipertensión.
Osteoartritis
El sobrepeso y la obesidad aumenta el riesgo de sufrir osteoartritis, ya que el mayor peso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones y al cartílago, con lo cual existe un mayor desgaste del mismo. La reducción de peso se asocia a una mejora de los síntomas relacionados con la artritis.
Cáncer
Existe un mayor riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer en las personas con sobrepeso u obesidad.
Problemas durante el embarazo
Las mujeres embarazadas con sobrepeso u obesidad tienen una mayor probabilidad de desarrollar diabetes gestacional, preeclampsia e hipertensión durante el embarazo. Asimismo, la obesidad aumenta las probabilidades de necesitar cesárea y bebés con sobrepeso.
Depresión y discriminación
Muchas personas con sobrepeso y obesidad tienden a ser objeto de burlas y discriminación en las escuelas y áreas de trabajo, lo que propicia la depresión en algunas de ellas.
Lesiones osteomusculares
La articulación lumbosacra, caderas, rodillas y tobillos son las articulaciones encargadas de soportar el peso corporal. En las personas con mayor peso se supera la resistencia límite a las cargas de manera constante, con lo cual pueden lesionarse con facilidad.
Sumado a esto el paciente obeso tiene una actividad física baja, por lo que presenta un músculo desnutrido, qué origina hipotrofia muscular acompañada de una baja resistencia y poca flexibilidad. Esto se suma a las alteraciones alrededor y dentro de la articulación, alterando completamente la biomecánica de la persona.
Ortesis para personas de mayor peso
Conscientes de la problemática ortopédica que sufren las personas de mayor peso en su aparato locomotor, hemos desarrollado la línea Orliman One Plus, para ofrecer productos a medida de los pacientes que requieren un tratamiento especial, por las particularidades físicas y morfológicas que presentan.
Esta línea de ortesis vanguardista es más resistente y permite una adaptación total y personalizada al paciente, consiguiendo brindar la protección, seguridad y confianza que caracteriza a cada uno de nuestros productos. Incluye las siguientes ortesis:
- RODILLERA ENVOLVENTE CON ARTICULACIONES BIAXIALES Y REFUERZOS METÁLICOS
- ESTABILIZADOR DE TOBILLO MULTIFUNCIONAL
- MUÑEQUERA CON FÉRULA PALMAR Y DE PULGAR RÍGIDAS
- FAJA SACROLUMBAR CON DOBLE SISTEMA DE TENSORES
Cada una adaptada a distintas necesidades y lesiones propias de cada parte del cuerpo, puedes descargar el catálogo completo haciendo click aquí.
Alimentación saludable para personas con problemas de obesidad
Los hábitos alimenticios influyen de manera primordial en el peso, por lo que, si queremos mantener un peso saludable, necesitamos desequilibrar la balanza consumiendo menos calorías de las que utilizamos normalmente.
Todos los alimentos y bebidas que consumimos cuentan y debemos tener presente que pueden variar de cultura a cultura, entre edades, de acuerdo al metabolismo, preferencias personales, etcétera. Pero hay algunas consideraciones básicas que podemos seguir en un plan de alimentación saludable:
Incluir en la dieta:
- Verduras, frutas y granos integrales, como arroz, avena y pan integral.
- Productos lácteos sin grasa o con bajo contenido de grasas.
- Distintas fuentes de proteínas con bajo contenido de grasa. Que incluyen mariscos, carnes y aves de poca grasa, huevos, nueces, semillas y productos de soya.
- Sustituir al aceite común por aceite de oliva o canola.
- Beber abundantes líquidos, al menos 1.5 litros de agua diario.
- Disminuir el tamaño de las porciones.
Debemos tratar de evitar
- Alimentos y bebidas con alto contenido de carbohidratos refinados.
- Alimentos con grasas saturadas y grasas trans, como postres y comidas fritas.
Ejercicios para perder peso
Lo ideal es mantener una actividad física a un ritmo de al menos 150 minutos a la semana, con actividad aeróbica de intensidad moderada como caminar a paso rápido.
Buscamos agitar la respiración y aumentar los latidos del corazón, sin agotar ni sobrecalentar nuestro cuerpo, por lo que la actividad aeróbica de intensidad moderada es bastante segura para la mayoría de las personas.
Sin embargo, es importante que, si sufres de alguna enfermedad cardíaca, hipertensión o diabetes consultes con tu médico antes de empezar a hacer cualquier actividad física.